viernes, 20 de abril de 2012

BASTA. NO. VALE YA. PARA. Hoy me apetece decirte que ya no te quiero más. Hoy me apetece que mi corazón se vaya de vacaciones y reemplazarlo por copas de vodka. Me apetece pasar de ese culo tan jodidamente perfecto que tienes. Hoy voy a vaciar mi cubo de babas y tragar la boca cada vez que pasas en vez de abrirla. Hoy me apetece, ¿sabes que me apetece?, me apetece salir corriendo sí, echarle los mismos huevos que le eché cuando decidí quererte, porque vida mía... DUELE QUERERTE. ¿Pero sabes por que quiero hacer todo esto?.

Porque quiero ver si me sigues, si vas detrás de mí corriendo o simplemente andando, sí te jugarías la vida por mí, o me dejarías ahí tirada, porque yo sí me lo jugaría por ti.

jueves, 19 de abril de 2012


Cansada de luchar contra mi corazón, de decir esa palabra que tanta veces he  podido utilizar y muy pocas veces cumplir, “basta”, basta de sentir, de guiarse por el corazón, basta de sufrir innecesariamente, basta. Una palabra de cinco letras, tan dificil de decir, o simplemente escribir, y tan sumamente difícil de poner acabo.
Porqué, ¿Qué se debe hacer cuando el corazón siente y no eres capaz de controlarle?. Cuando los sentimientos se disparan sin poder echarles el freno, sin que tú misma, realmente te des cuenta, ¿qué haces?... sí lo único que quisieses es, salir corriendo, echar esos sentimientos al aire mientras huyes de ellos y que no vuelvan nunca más a alcanzarte, y sí vuelven, que tu puedas luchar contra ellos, no que ellos luchen contra ti, que no te coman por dentro, parelizandote, dejandote quieta, sin saber que hacer, sin saber qué sentir y sin dejarte vivir.

Si pudiese decirte algo, te diría que te quedases conmigo, que apuesto por los dos, apuesto el 100%, y no me equivoco, y me la jugaría, hasta el fondo y me da igual si pierdo, pero cuando estoy segura, siempre gano, ¿me retas?.

martes, 10 de abril de 2012

STOP.


Sientes. Y basta muy poco para darte cuenta que dentro de ti existe una sensación extraña, que hace que te revoluciones, que te entre ese cosquilleo en el estomago y esas ganas de sentir. Ganas. Eso es lo que falta. Porque de nada sirve que una persona tenga muchas ganas, cuando la otra no tiene ninguna, cuando se forma algo, es de dos, y esos dos deben luchar, porque uno solo no puede tirar del timón, hacen falta dos personas, dos corazones, dos manos que se junten para luchar contra todo lo que venga.
Aunque aveces el corazón debería tener un botón de Stop, donde poner pulsarle cuando no debes sentir más de la cuenta, cuando tu corazón va viento en popa y por más que intentas detenerlo es imposible, un botón que pare el curso de las cosas, que puedas decidir que hacer o que no. Pero por suerte, o desgracia, es imposible… cuando el corazón quiere sentir, lo hace, y no le importa lo que pienses o quieras, porque es imposible controlarlo, y por ello más de una vez sufrimos, porque siente muy deprisa, pero olvida muy despacio, y cuando alguien se cuela dentro, y cuela bien hondo, es muy complicado olvidar… sino que se lo digan a mi corazón.

domingo, 8 de abril de 2012

Quizá la mayor capacidad que posee nuestra mente es la capacidad de sobrellevar el dolor. El pensamiento clásico nos enseña las cuatro puertas de la mente, por las que cada uno pasa según sus necesidades.
La 1ª es la puerta del sueño. El sueño nos ofrece un refugio del mundo y de todo su dolor. El sueño marca el paso del tiempo y nos proporciona distancia de las cosas que nos han hecho daño.
La 2ª es la puerta del olvido. Algunas heridas son demasiado profundas como para curarse, o para curarse deprisa. Además, muchos recuerdos son dolorosos y no hay curación posible. El dicho de que "El tiempo lo cura todo es falso". El tiempo cura la mayoría de las heridas, el resto estas escondidas detrás de esa puerta, el olvido.
La 3ª es la puerta de la locura. A veces, la mente recibe un golpe brutal que se esconde en la demencia. Puede parecer que eso no sea beneficioso, pero lo es. A veces, la realidad es solo dolor, y para huir de ese dolor la mente tiene que huir de esa realidad. 
La última puerta es la de la muerte. El último recurso. Después de morir nada puede hacernos daño, o eso nos han enseñado.

viernes, 6 de abril de 2012


Se acabó. Esas fueron sus últimas palabras, y antes añadió que estaba cansado, y yo me pregunto cansado, ¿de qué?... de ver como le pagaban con la misma moneda, ver como de nada servían esas simples palabras que escribía, porque al fin y al cabo, era solamente eso, palabras… palabras vacías, y sin ningun condimento, palabras que no valían nada… solamente para hacer más daño.
Quizás nunca se paró a pensar, que toda persona tiene un límite, que el amor no es eterno y mucho menos cuando no es correpondido y que la que se cansó fui yo…
Me cansé de llorar cada noche, de sentirme vacía, de intentar buscar un porqué o una explicación a todo y nunca encontraba absolutamente nada, tan solo preguntas y más preguntas sin ninguna respuesta, me cansé de imaginar noches en las que podías estar a mi lado, acariciandome, besandome… me cansé de quererte, de amarte de noche y de día, me canse de luchar por un sueño, que no estaba al alcance de mis manos…
Y ahora, ya es tarde… es tarde para todo, para volver a comenzar, para olvidar y curar esa herida, es tarde para volver a mirarnos a los ojos, y recuperar esa mágia, es tarde para volver a amarnos…

miércoles, 4 de abril de 2012

Pensaba en la suerte que tengo.
Pensaba: "esta chica es realmente guapa". Y además pensaba en el momento que estamos viviendo y que... Mira, casi tengo miedo de decirlo.
Ella se acerca, y lo observa con ojos exultantes, resplandecientes, llenos de entusiasmo.
- No tengas miedo cariño, te lo ruego, dilo.
- Él, la mira a los ojos, inspira profundamente y al final lo suelta...
- Pues bien, que jamás he sido tan feliz en mi vida.
- Amor mío, eso es maravilloso. Lo abraza con fuerza, y llena de entusiasmo.


Él, esta feliz, la observa con disimulo mientras ella lo abraza, esta algo enfadado consigo mismo, le gustaría haber dicho algo más, pero aún así sonríe... Por un momento recuerda: "Ahora o nunca, te lo ruego. Ahora o nunca más, estoy segura de que tú también me amas".

martes, 3 de abril de 2012

Si me preguntasen que haría sí volvieses, realmente no sé que diría ni como actuaría... por que sí, reconozco que lo pasé mal, que no ha visto días fácil, que hubo momentos en que esa nube negra que se postró encima mía no se iba, que por más que yo intentaba decir "puedo, y voy a seguir" , hacía todo lo contrarío por que me era imposible... Y por si esto fuera poco, vinieron las preguntas, sin respuestas... el por qué de todo esto, el si yo me merecía esto... y cosas más tipo así... Pero después de esto, de perderme, logré encontrarme, quizás no curaré todo ese daño que siento dentro, pero puedo decir que estoy "mejor", que ya los días no se hacen tan cuesta arriba, que en el camino no hay tantas piedras... y que aunque sea poco, voy viendo la luz... Todo esto no quiere decir que no te quiera, que no te necesite, y que haya olvidado todo... pero mi vida debe seguir, contigo o sin tí, aunque cueste... Y sí volvieses mi corazón, te cogería con los brazos abiertos, pero mi cabeza... mi cabeza debería de pensar demasiado, y ella si que no sabría que hacer.